No puedo vivir sin esa parte que eras para mí
No la quiero soltar, no la quiero dejar ir
A menudo la convoco inconscientemente,
en el afán de congraciarme contigo.
Por ti era unas veces ángel otras demonio
No soy santo, aunque tu me convoques de ahí
Pero no quiero, no me siento preparado
para dar vuelta la página aún, contigo
a pesar de que me pongas a prueba
Estás siempre presente y te bendigo con mi vida
todas las veces que me siento zozobrar
quedándote en mi naufragio y volviéndote
un oportuno salvavidas para mí
No he de negarte, representas demasiado para mí
porque conoces todas mis dichas y pesares
Me afano de continuo en renovarme para con vos
Mal que me pese por nuevas mochilas que trajeras
Eres lo mejor que me ha pasado
Arbi.
|